Los incendios forestales en Rusia han destruido cerca de 668.000 ha. desde el principio del verano. Las reacciones de cólera ante la lentitud de las intervenciones de los bomberos y a su, a veces, relativa ineficacia, pueden hacer pensar que las consecuencias políticas de esta catástrofe ambiental podrían ser muy negativas para el poder, lo que sería probable en el caso de una sociedad realmente democrática, pero ¿lo será en Rusia?
Responsabilidades políticas a todos los niveles
A nivel (…)